Los líderes europeos discuten garantías de seguridad para Ucrania tras conversaciones con Trump.

Los líderes europeos discuten garantías de seguridad para Ucrania tras conversaciones con Trump.

Los líderes europeos mantienen nuevas conversaciones tras su reunión en la Casa Blanca con Volodímir Zelenski, mientras persiste la incertidumbre sobre la disposición de Vladímir Putin a reunirse con el presidente ucraniano.

La "coalición de los dispuestos", copresidida por Keir Starmer y Emmanuel Macron, se reunió primero de forma virtual antes de unirse a una videoconferencia organizada por el presidente del Consejo Europeo, António Costa. Esta ráfaga de actividad diplomática se produce tras una visita conjunta sin precedentes con Zelenski a la Casa Blanca, destinada a instar a Donald Trump a adoptar una postura más firme con Putin, apenas días después de su cumbre amistosa en Alaska.

El lunes, Trump y varios líderes europeos en Washington afirmaron que Putin había aceptado celebrar conversaciones cara a cara con Zelenski en las próximas semanas en un esfuerzo por poner fin a la guerra de tres años y medio en Ucrania. Macron propuso Ginebra como posible sede de la reunión, y un alto funcionario estadounidense dijo a Reuters que Hungría también estaba siendo considerada. Sin embargo, Moscú aún no ha confirmado que se esté planeando tal encuentro —que sería el primero entre ambos líderes desde la invasión—.

El asistente del Kremlin Yuri Ushakov solo afirmó que Putin y Trump discutieron la idea de "elevar el nivel de los representantes" en las conversaciones sobre Ucrania, sin aclarar qué significaba eso ni mencionar una posible reunión trilateral con Trump y Zelenski. El martes, el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, declaró a la televisión estatal que cualquier encuentro entre los presidentes ruso y ucraniano requeriría una preparación exhaustiva.

En una entrevista con Fox News, Trump reconoció que Putin podría no querer llegar a un acuerdo, añadiendo que el líder ruso enfrentaría una "situación difícil" si ese fuera el caso.

En el centro de las conversaciones del martes entre los aliados europeos estaba la cuestión de qué garantías de seguridad podían ofrecerse a Ucrania. Zelenski describió estas garantías como "un tema clave, un punto de partida hacia el fin de la guerra", y acogió con satisfacción la indicación de Trump de que Estados Unidos estaba dispuesto a participar en dicho acuerdo. Zelenski afirmó que las garantías se "formalizarían de algún modo en la próxima semana o diez días", aunque ese plazo podría resultar complicado dado el ritmo de la diplomacia que involucra a la Casa Blanca de Trump.

En una publicación en redes sociales, Trump mencionó que las conversaciones en la Casa Blanca incluían planes para que países europeos proporcionaran garantías de seguridad a Ucrania, con Estados Unidos actuando como "coordinador". Reino Unido y varios aliados europeos han sugerido una "fuerza de reassurance" que podría enviarse a Ucrania bajo un futuro acuerdo de paz para disuadir una mayor agresión rusa. Estos planes requerirían un fuerte apoyo estadounidense, pero Trump se ha mostrado reacio a desplegar tropas estadounidenses como garantes. En cambio, dijo que Estados Unidos estaba dispuesto a asistir con operaciones aéreas.

Moscú rechazó cualquier posibilidad de que personal de la OTAN se estacionara en Ucrania, manifestando su firme oposición a dichos escenarios. Otras propuestas para garantías de seguridad incluyen que los aliados occidentales ofrezcan a Ucrania una protección al estilo del Artículo 5, similar al compromiso de defensa colectiva de la OTAN.

En una declaración tras la reunión del lunes en la Casa Blanca, la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, afirmó que, aunque Ucrania no se uniría a la OTAN, los aliados occidentales se comprometerían con una cláusula de seguridad colectiva que garantizaría que Ucrania recibiera apoyo de todos los socios, incluido Estados Unidos. Estados Unidos ha declarado que está preparado para actuar si es atacado nuevamente. Zelenski ha rechazado firmemente cualquier acuerdo que restrinja el tamaño del ejército ucraniano, enfatizando que un ejército fuerte es esencial para la seguridad del país. Esta postura contradice directamente los términos que Putin ha indicado previamente que serían aceptables para poner fin a la guerra.

Aunque los líderes occidentales adoptaron un tono optimista y congratulatorio hacia Trump en la Casa Blanca, la brecha entre las exigencias de Rusia y la disposición de Ucrania a hacer concesiones sigue siendo amplia. Aún existe una incertidumbre significativa sobre lo que Trump propuso realmente y si Putin aceptó algo durante la cumbre de Alaska. Algunos temen que Trump pueda haber exagerado los resultados y malinterpretado la apertura de Moscú al compromiso.

La reunión del lunes en la Casa Blanca aportó poca claridad sobre las condiciones territoriales de Putin. El líder ruso insiste en que Ucrania se retire de Donetsk y Lugansk, mientras que Zelenski ha establecido una línea firme contra ceder cualquier territorio más allá del actualmente ocupado o legitimar el control de Moscú.

Algunos analistas argumentan que, a pesar de la actividad diplomática, ha habido poco progreso genuino hacia el fin del conflicto. "No pasó nada en Anchorage el 15 de agosto. No pasó nada ayer en Washington DC", escribió Gérard Araud, ex embajador francés en Estados Unidos, en X. "Putin, Zelenski y los líderes europeos quedaron aliviados: habían evitado que Trump tomara decisiones indeseadas. Fue un triunfo de la vaguedad vacía y los compromisos sin sentido".



Preguntas Frecuentes
Por supuesto. Aquí tienes una lista de preguntas frecuentes sobre los líderes europeos discutiendo garantías de seguridad para Ucrania tras las conversaciones con Trump, diseñada para ser clara y útil para una variedad de lectores.



Preguntas de Nivel Básico



1. ¿Qué son las garantías de seguridad para Ucrania?

Las garantías de seguridad son promesas formales a largo plazo de otros países para proporcionar a Ucrania equipamiento militar, entrenamiento, inteligencia y apoyo económico para defenderse de una agresión futura, principalmente de Rusia.



2. ¿Por qué los líderes europeos discuten esto ahora?

Lo discuten con urgencia debido a las recientes elecciones presidenciales estadounidenses y a las conversaciones con Donald Trump. Existe una gran preocupación de que el apoyo de EE.UU. a Ucrania pueda cambiar bajo una nueva administración, por lo que las naciones europeas planean cómo garantizar que la defensa de Ucrania se mantenga fuerte incluso sin la participación total de EE.UU.



3. ¿Quién participa en estas discusiones?

Líderes europeos clave de países como Alemania, Francia, Reino Unido y Polonia, así como funcionarios de la Unión Europea y la OTAN. Están coordinando su respuesta basándose en las señales de la potencial próxima administración estadounidense.



4. ¿Qué tiene que ver Donald Trump con esto?

Como presunto nominado presidencial republicano, sus declaraciones pasadas sugieren que podría presionar para un rápido final negociado de la guerra que podría ser desfavorable para Ucrania o reducir significativamente la ayuda militar y financiera de EE.UU. Los líderes europeos se preparan para esta posibilidad.



Preguntas de Nivel Intermedio



5. ¿Cómo serían en la práctica estas garantías lideradas por Europa?

Probablemente implicarían un compromiso plurianual para financiar compras de armas, ayudar a modernizar el ejército ucraniano y potencialmente estacionar tropas en países vecinos para entrenamiento y disuasión, sin llegar a enviar tropas de combate de la OTAN al interior de Ucrania.



6. ¿Cuál es el mayor desafío para crear estas garantías?

El principal desafío es llenar el vacío potencial que dejaría Estados Unidos. EE.UU. ha sido el mayor proveedor individual de ayuda militar a Ucrania. Las industrias de defensa europeas están aumentando la producción, pero tomará tiempo y una enorme cantidad de financiación coordinada igualar ese nivel de apoyo.



7. ¿En qué se diferencia esto de que Ucrania se una a la OTAN?

Unirse a la OTAN otorgaría a Ucrania la protección del Artículo 5, lo que significa que un ataque contra Ucrania se consideraría un ataque contra todos los miembros de la OTAN, requiriendo una respuesta militar colectiva. Estas garantías de seguridad son una alternativa potente, pero se quedan cortas respecto a esa promesa plena de defensa mutua automática.